Desde el Movimiento Argentino para la Producción Orgánica (MAPO), y en relación a la reciente noticia del Gobierno Nacional respecto de la aprobación comercial del trigo HB4, expresamos nuestra postura en contra del uso de Organismos Genéticamente Modificados (OGM).
MAPO, ya en la XII Conferencia de Agricultura Orgánica Internacional en Mar del Plata (noviembre de 1998), se sumó a la posición de la Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Orgánica (IFOAM) contra los productos transgénicos. Todas las regulaciones orgánicas alrededor del mundo prohíben el uso de OGM en cualquier instancia de la cadena productiva y en los productos orgánicos.
La ingeniería genética genera los OGM para otorgarle, por ejemplo, a las plantas resistencia a un herbicida, ello implica que se siembra esa semilla transgénica y cuando la planta está desarrollada se le puede aplicar ese herbicida específico y no se muere, pero sí se muere todo el resto de especies vegetales que están en ese ecosistema.
Entre los problemas que pueden desencadenarse por el uso de OGM, se destacan:
- CONSECUENCIAS DE LOS OGMs SOBRE EL SISTEMA AGRÍCOLA Y LOS AGRICULTORES
El uso de OGM representa un riesgo para la independencia de los agricultores y su derecho a las semillas.
El evento transgénico está en el polen de las plantas, el cual, si vuela, se traslada o se transporta por insectos, puede contaminar otros cultivos que no sean transgénicos. Las distancias son imposibles de precisar, se escapan de nuestro control.
En todas las etapas productivas, desde la siembra hasta la cosecha, transporte y procesamiento, hay que tomar medidas de control mucho más estrictas para minimizar el riesgo de contaminación y de esa manera proteger la integridad orgánica de los productos.
- CONSECUENCIAS ECOLÓGICAS DE LA LIBERACIÓN DE OGMs AL AMBIENTE
Los OGMs, al estar incluidos en seres vivos, pueden esparcirse y propagarse. Una vez que se liberan al ambiente es imposible medir las consecuencias de ello y mucho menos volver atrás.
Con los OGM se promueve el monocultivo y el aumento en el uso de herbicidas y pesticidas, viéndose amenazada seriamente la biodiversidad.
- PROBLEMAS DE COMERCIALIZACIÓN
Los productores que quieren preservar sus cosechas de productos orgánicos libres de OGM, y los elaboradores, comercializadores y consumidores que quieran comercializar y/o consumir productos libres de OGMs, se ven expuestos a problemas masivos de contaminación con OGM. Respecto específicamente del trigo, esta situación la exponen también todas las entidades del agro, ya que los mercados han demostrado no querer consumir trigo transgénico ni en el mercado interno ni en el exterior.
- IMPACTO EN LOS CONSUMIDORES
No se puede precisar el impacto que puede producir la ingesta de OGMs en la salud del consumidor. No está ensayado, no está medido. Por eso el orgánico se basa en el principio precautorio y se opone radicalmente a su uso. Siempre pensando en el bienestar del consumidor.
Ante el intento de aprobación parcial del trigo transgénico argentino, reafirmamos una vez más nuestro repudio al uso de OGMs en la agricultura y la alimentación. Una vez que se “suelta” el OGM al ambiente ya no podremos volver atrás. Está en todos no consumir ni apoyar esos productos.