Consultora Asociada – AG SUSTENTABLE
Los “kanjis” son signos ideográficos, la piedra angular de la escritura japonesa. Son símbolos que tienen uno o varios sentidos, tienen una o varias pronunciaciones y se pueden combinar para formar palabras con nuevos sentidos y pronunciaciones.
La palabra japonesa “ki-ki”, que nosotros traducimos como “crisis”, se describe con dos ideogramas diferentes. El primer “ki”, significa “peligro o temor” y el segundo “ki” se puede traducir como “oportunidad o surgir”.
En el último siglo, la palabra crisis se puso de moda en las organizaciones: crisis climática, de recursos, política, económica, ética y moral, reputacional, por solo nombrar algunas.
El análisis del ideograma ki-ki, nos invita a entender las crisis de la siguiente manera: Podemos concentrarnos en el peligro o dejarnos llevar por el miedo, en este caso el resultado será negativo; o podemos ver la oportunidad, si aprendemos de las causas que originaron la crisis, transfrormándola en un hecho positivo.
En el ámbito de la gestión de las organizaciones, podríamos decir que tomar conciencia sobre las crisis que atravesamos como humanidad posibilitó el desarrollo de espacios de debate, conversaciones e investigaciones, basadas en relaciones colaborativas, alianzas, consensos, co-construcción y legitimad internacional. Analicemos algunos de estos casos:
¿Podemos afirmar entonces, que la conciencia de la situación de crisis posibilitó efectivamente espacios de oportunidad? Creemos que sí.
En materia de gestión de la Sostenibilidad, entre otras cuestiones, permitió el desarrollo de herramientas que constituyen el faro guía sobre el camino hacia donde debemos ir para alcanzar el desarrollo sostenible.
Como profesionales de la gestión, en la planificación de las organizaciones, sabemos de la importancia que reviste definir a dónde debemos ir. Planificar según Harold Kantz y Cyril O’Donnel, es “decidir en forma anticipada qué hacer, cómo hacerlo, cuándo hacerlo y quién lo hace”.
Nadie pone en duda que nos enfrentamos a una profunda crisis y a un contexto de alta incertidumbre, en donde pareciera ser de “ciencia ficción” tener en claro, y de manera anticipada, el “qué, cómo, cuándo y quien”.
Frente a esta situación, no nos olvidemos del camino recorrido. Hoy más que nunca, invitamos a adherir al compromiso de basar la planificación de las organizaciones sobre las diferentes herramientas de gestión de Sustentabilidad para alcanzar un verdadero desarrollo sostenible.