La última convocatoria de Naciones Unidas se caracterizó por las polémicas que dejó, entre ellas, que un petrolero lideró una conferencia de cambio climático o el hecho de que el documento final -aprobado con retraso- incluya acuerdos de “transición” y no de “decisión”; tampoco hubo lugar para la perspectiva de género, un punto clave para exponer que la crisis ambiental es un factor más de la desigualdad que existe entre hombres y mujeres.
Y aunque prometía la presencia de líderes mundiales claves como el presidente de Estados Unidos, Joe Biden; el de China, Xi Jinping, y hasta el Papa Francisco, ninguno de ellos llegó a Dubai. Tampoco se alcanzó el pacto final que tenía en mente la sociedad científica y ambiental: abandonar para ‘siempre’ la era de los combustibles fósiles.
En ese marco, dialogamos con Camila Mercure, analista de Política Climática en Fundación ambiente y recursos naturales (FARN), que participó en Dubai de la COP28 y aseguró que el documento tuvo un “lenguaje muy generalista y abstracto que por momentos da rienda suelta a qué después los países interpreten lo que quieran”.
A qué se comprometió Argentina
Argentina va a seguir comprometida con el Acuerdo de París, en temas de clima. A pesar de que la COP28 se realizó apenas unos días después de que asumiera un nuevo Gobierno en nuestro país, se mandó una delegación y se estuvieron negociando distintos temas.
“Comprometerse no sería la palabra pero sí se llegaron a distintas conclusiones que hay que ver de qué manera Argentina la baja a su país, ejemplo temas de adaptación, financiamiento”, explica Mercure.
Y si bien las declaraciones del nuevo presidente Javier Milei respecto del cambio climático fueron polémicas, la analista apunta que el hecho de que los países estén yendo a las COP demuestra que el país “tiene un proyecto de compromiso y ambición climática”.
Mayor emisión, mayor responsabilidad
Como en varios eventos mundiales de clima, se acordó que los países que más emiten van a hacer un fondo común para los países menos desarrollados. Es que ya está demostrado que quienes menos han contribuido con el cambio climático son aquellos que enfrentan las peores consecuencias, es decir, los países del sur global. De hecho, en el texto de Dubái se reconoció que los países en desarrollo, muy endeudados, necesitan billones de dólares para cumplir sus objetivos climáticos de esta década.
“Sucede que en el balance global ya no estamos hablando de que necesitamos millones, estamos hablando de trillones. Ya esa meta y esa movilización de financiamiento están desactualizadas, ni siquiera en 2021 se cumplió. La situación empeora porque casi el 70% de ese financiamiento se dio en forma de préstamo y no donaciones, eso hace que la deuda de los países se acentúe y se debiliten sus economías”, afirma la analista.
Por último, la COP29 será en Azerbaiyán y habían anunciado que el comité estaba solamente integrado por hombres, lo que hizo que se empezaran a alzar las voces e incorporar a las mujeres. “Creo que seguimos viviendo estas cosas pero se van alzando voces para corregir cosas que están mal”, concluye Mercure.