La alimentación es fundamental para el desarrollo humano, sobre todo para las infancias. Cuando un niño o niña no ingiere los nutrientes necesarios, y, en consecuencia, no se desarrolla adecuadamente, se hacen presentes enfermedades que podrían prevenirse si se llevara una alimentación equilibrada. Uno de los grandes riesgos es una mayor probabilidad de enfermarse, porque no tienen su sistema inmunológico en condiciones óptimas, y no cuentan con las defensas suficientes.
Todos los alimentos forman parte de una dieta equilibrada, pero evitar los excesos es lo que marca la diferencia, por eso es importante el balance y la autorregulación. Tener conciencia sobre lo que se ingiere, apelar a la moderación, saber variar entre platos y tomar agua natural es lo que logra que nuestro organismo funcione en la mejor condición.
Hablamos de “nutrientes críticos” cuando nos referimos a aquellos nutrientes que resultan críticos para la salud si se los consume de manera excesiva, como por ejemplo los azúcares, las grasas saturadas y la sal. Y el principal problema es que muchas veces se encuentran dentro de los productos ultraprocesados, y las familias no saben que los están consumiendo ya que carecen de dicha información.
“El consumo de alimentos con nutrientes críticos en exceso desencadenan que las chicas y los chicos se enfermen cada vez más temprano de enfermedades que antes eran del adulto. Hoy en día se ven cada vez más niños y niñas con diabetes, hipertensión u obesidad. Eso después se refleja en una adultez menos saludable”, explicó Verónica Risso Patrón, oficial de nutrición y salud en UNICEF Argentina.
En suma, los nutrientes críticos también afectan la salud mental. “Niñas y niños tanto con desnutrición como con sobrepeso y obesidad pueden tener un bajo rendimiento escolar. La desnutrición genera daños cognitivos ya que no se desarrollan las suficientes conexiones neuronales para tener un desarrollo apropiado. Y en el caso de la obesidad, se pueden volver inseguros e introvertidos. En adolescentes puede llegar a generar ansiedad y depresión”, detalló Delhi Trejo, oficial de nutrición en UNICEF México.
Para cerrar, Risso Patrón explicó que existen múltiples condicionantes que llevan a una mala alimentación, por ejemplo: los hábitos, la falta de información y la falta de tiempo, sobre todo en aquellos que viven en zonas urbanas. Sin embargo, insistió en la importancia de ingerir productos frescos, como las frutas y las verduras. “Es muy importante volver a la cocina casera y tratar de disminuir los ultraprocesados, que son tan nocivos para la salud presente y futura”, advirtió.
Para seguir impulsando hábitos saludables, se lanzó la campaña “PIXAR RESTÓ. Experiencias que emocionan”, que estará activa hasta el 26 de octubre. La misma forma parte de una colaboración sostenida entre Disney y UNICEF para fortalecer el bienestar físico y emocional de niños, niñas y adolescentes, y que así puedan vivir una vida más plena, alcanzando sus sueños y su potencial.
La propuesta invita al público a contribuir con los programas para la infancia de UNICEF, mediante una donación en su sitio oficial (help.unicef.org/disney). Quienes la realicen, tendrán acceso a una Master Class conducida por la cantante y actriz mexicana Danna Paola y el reconocido chef argentino Tomás Kalika.
En esta clase especial pre-grabada, prepararán recetas exquisitas y saludables, inspiradas en tres películas de Disney y Pixar: COCO, LUCA y RED (disponibles en Disney+), y compartirán consejos para cocinar platos nutritivos y llevar una vida más saludable. Además, quienes donen también tendrán la oportunidad de ganar el acceso a un Meet & Greet virtual con ellos.
DATOS ESTADÍSTICOS | Fuente: UNICEF
ARGENTINA
– En Argentina tenemos la tasa más importante de malnutrición por exceso de peso de la región en niños y niñas hasta los 5 años: es el 13%.
– El 41% de los niños, niñas y adolescentes de 5 a 17 años poseen sobrepeso u obesidad.
– Casi el 70% de los adultos posee algún grado de exceso de peso.
– Consumo de ultraprocesados: en niños y niñas de 2 a 12 años, el consumo de snacks triplica al de los adultos, hablando de un 26% en niños y niñas y un 10% en adultos.- Golosinas:
– 6 de cada 10 niños de 2 a 12 años consumen golosinas 2 veces por semana o más.
– 5 de cada 10 adolescentes de 13 a 17 años consumen golosinas 2 veces por semana o más.
Bebidas azucaradas:
– El 46% de niñas y niños consume bebidas artificiales con azúcar, como gaseosas y jugos, al menos una vez al día.
– El consumo de frutas y verduras es muy bajo sobre todo en chicos de población vulnerable. Sólo el 30% de chicas y chicos consume verduras y/o frutas diariamente.