En este mes de marzo se conmemoró el día de la mujer, para seguir concientizando sobre la lucha que hay en el mundo frente a la participación social y su desarrollo íntegro como persona. Este año desde la Organización de las Naciones Unidas (ONU) presentaron el lema ”Igualdad de género hoy para un mañana sostenible”, promoviendo potenciar la igualdad de género en el contexto de la crisis climática.
La perspectiva de género es una temática que a lo largo de los años creció y está inmersa en todas las actividades de nuestra vida. Cómo la equidad de género, el cambio climático también aparece en nuestra agenda, ya que se presenta como un desafío para toda la sociedad. Estas situaciones se unen y están en auge estos últimos años. Desde Innovar Sustentabilidad nos conectamos con Yasmín Tramannoni, licenciada en ciencias políticas y activista socio ambiental para conversar sobre esta materia y concientizar sobre dicha problemática.
Cuando hablamos de cambio climático no nos referimos solamente al lado meramente ecológico, sino que también conocer el entramado social, cultural, político y económico. “Al respecto, el vínculo entre ambiente y género es estructural” define Tramannoni. En palabras de Yayo Herrero, la explotación que históricamente se ejerció y se sigue ejerciendo sobre la naturaleza y la subordinación de las mujeres a los hombres en el actual sistema patriarcal son dos caras de una misma moneda.
En conversación con la politóloga Tramannoni nos expresó que es fundamental que todas las soluciones climáticas sean co-creadas garantizando la participación activa de mujeres y sectores históricamente considerados alternos, pormenorizados, vulnerados, desde una mirada integral, inclusiva y de género. Desde la ONU plantean que para lograr un desarrollo sostenible y una mayor igualdad de género es esencial seguir explorando las oportunidades, así como las limitaciones, para permitir que las mujeres y las niñas tengan voz y participen en igualdad en la toma de decisiones relacionadas con el cambio climático.
“La importancia de la participación política activa de las mujeres y otros colectivos hegemónicamente excluidos y subordinados tiene que verse traducida en la posibilidad real de ejercer cargos de toma de decisiones”, explica la activista socio ambiental. En un estudio realizado por las Naciones Unidas se observó que el 70% de los 1.300 millones de personas que viven en condiciones de pobreza son mujeres. En las áreas urbanas, el 40% de los hogares más pobres están encabezados por mujeres.
El cambio climático afecta de manera diferenciada a las mujeres y a los varones, siendo que el mayor impacto negativo recae sobre las primeras. “Si buscamos entender las causas del por qué las mujeres somos más vulnerables al cambio climático, podemos empezar por ahí: la crisis climática profundiza las desigualdades ya existentes en nuestras sociedades”, comenta Tramannoni. A su vez, las mujeres tienen un menor acceso al agua segura, por lo que hay mayor vulnerabilidad ante riesgos de enfermedades y mayor malnutrición.
Por Rocío Morabito.